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lunes, 10 de septiembre de 2012

La Policía permite los perros sueltos a no ser que sean de raza peligrosa o creen conflictos

El Ayuntamiento reconoce que su postura es ser "tolerante" a pesar de la normativa

La ordenanza de tenencia de animales obliga a que las mascotas vayan siempre atadas en los espacios públicos

jaione sanz - Miércoles, 5 de Septiembre de 2012 - Actualizado a las 05:13h

 
Un perro suelto hace las necesidades en un parque de Vitoria.

Un perro suelto hace las necesidades en un parque de Vitoria. (Josu Chávarri)

Vitoria. Las normativas municipales están para acatarlas. O no. La de tenencia de animales dice que los perros deben ir siempre sujetos por la ciudad, tanto en sus calles como parques, pero su incumplimiento es frecuente. Y no por casualidad. El gabinete de Javier Maroto reconoció ayer, un día después de que DNA se hiciera eco de este crecimiento fenómeno, que la posición del Consistorio es de "tolerancia". Hasta el punto, incluso, de hacer la vista gorda en la mayoría de situaciones, mientras no se palpe sensación de peligro.

Frente a la ordenanza municipal, la Policía Local actúa con permisividad de acuerdo a dos criterios. Sólo llama la atención a los dueños que lleven a sus perros sueltos si éstos pertenecen a razas potencialmente peligrosas. Y sólo interpone denuncias a quienes se hayan olvidado de la correa si la mascota ha provocado un conflicto. De lo contrario, los animales pueden disfrutar libremente, sin ataduras, en calles o parques. Una posición la del Ayuntamiento que probablemente alimentará aún más la guerra dialéctica abierta entre los ciudadanos que consideran que la norma debe cumplirse a rajatabla y quienes creen que no es razonable porque impide a sus mascotas desfogarse y socializarse con otras.

Seguramente este conflicto podría minimizarse si el Consistorio habilitara zonas de esparcimiento para los perros, una fórmula que gusta a uno y otro frente y que ya existe en otras localidades como La Laguna, Ceuta, Mérida o Logroño. Y eso que estas ciudades ni son tan verdes ni tienen la corona que así lo atestigua. La demanda ciudadana se palpa a pie de calle y en el buzón de la web del Ayuntamiento, pero el gabinete de Javier Maroto reconoce que no se ha planteado aún habilitar espacios donde las mascotas puedan desahogarse con plena libertad sin molestar a nadie. Hace dos años y medio, sí hubo "un intento" para habilitar este tipo de áreas, pero la idea acabó aparcándose y desde entonces ni el gobierno socialista ni el popular han vuelto a sacarla del cajón.

En este escenario, la realidad es que la creciente presencia de animales en los nuevos barrios y la abundancia de canes sueltos enfrenta día a día a los ciudadanos. Ayer, la web de DNA acumulaba decenas de comentarios contrapuestos a propósito de este polémico asunto. Hay quienes opinan que la obligación -aunque no se exija en la práctica- de llevarlos siempre atados va contra sus necesidades físicas y de socialización y, además, consideran que lo normal es que las mascotas no generen situaciones de riesgo. "He invertido mucho tiempo en la educación de mi perra, la normativa va contra la naturaleza de estos animales y por eso no la cumplo. Y aunque es cierto que hay dueños que no respetan, por ello no debemos pagar justos por pecadores", señala un vitoriano que se hace llamar HappyDog. Otro lector, identificado como Ciudadano, acusa a quienes exigen el acatamiento estricto de la ley que se dejan llevar por "fobias perrunas" y cree que la Policía "bastante tiene con preocuparse de los asuntos importantes de la ciudad". En la misma línea, Txakur asegura que lleva cinco años paseando a su perra y "jamás he visto a un perro morder a nadie", pero sí ha sido testigo de "peleas y agresiones entre personas".

El otro frente también hace oír su voz alto y claro. Estos ciudadanos consideran que sí se producen molestias e incluso situaciones de peligro, creen que las normativas están para ser cumplidas, se quejan de que los dueños suelen responder de malas formas cuando se les pide que aten a sus animales y lamentan la permisividad policial. Un lector identificado como Jo critica "el poco civismo" de algunos propietarios, así como "el pasotismo" de los agentes, por lo que se pregunta "para qué legislar si luego quien debe velar por su cumplimiento no lo hace". Eu, por su parte, opina que "si eres dueño de un perro y no cumples la normativa al repecto, no puedes exigir luego a tu vecino -entre otros ejemplos- que no haga fiestas hasta la tantas". No obstante, está convencido de que "Vitoria, más que que de perros peligrosos y maleducados,esta llena de dueños maleducados", por lo que solicita más urbanidad.

Noticia de noticiadealava.com