Un laboratorio pontevedrés detectó cuatro bacterias, levaduras y hongos - El lote sospechoso se vendió en Verín - "Perdí 9; en la autopsia tenían el estómago reventado", dice un cazador
J.Fraiz | Ourense Emilio, veterano cazador de Monterrei, era consciente de que la causa de la muerte repentina de nueve de sus veinte perros de batida no se debía a la parvovirosis, una enfermedad viral que sobre todo afecta a cachorros y también es fatal. Se saciaban con un pienso que compró por primera vez hace mes y medio y, a finales de julio, al día siguiente de darles la comida aparecieron muertos. "Sería esa remesa, primero fueron cinco y luego otros cuatro. Sangraban por la nariz. En la autopsia que le hice a uno tenía el estómago reventado y hemorragia en las tripas", señala.
El hombre, miembro de una peña dedicada al jabalí, se presentó con el cadáver de uno de los animales en el comercio de Verín donde se despachó el lote supuestamente defectuoso que ha originado decenas de fallecimientos de animales. "Me dijo que estaba loco, que era imposible, que tenía que ser la parvovirosis. Pero justo murieron los más sanos y más comedores, y a mí en 30 años que llevo de cazador nunca me había pasado esto".
Las conclusiones oficiales dependerán de analíticas a cargo de la delegación en Ourense de la Consellería de Medio Rural. Se han recogido dos muestras para los test y la remesa sospechosa fue inmovilizada. El informe de la Xunta completará las investigaciones abiertas por el Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil. La Fiscalía Provincial de Medio Ambiente aún no tiene atestado encima de la mesa.
Un primer análisis de un laboratorio público de Mouriscade (Pontevedra), con muestras remitidas por veterinarios de la zona, detectó cuatro tipos de bacterias, levaduras y hongos "aparte de que la formulación no tenía nada que ver con lo que figuraba en el etiquetado", señala Inmaculada Vila, profesional con clínica en Vilardevós. Los envases "no tienen ni número de lote ni fecha de caducidad", extremos que el vendedor niega.
Emilio enumera muchos otros casos registrados, como el suyo, desde finales de julio en varios municipios de todo el sureste ourensano. "En Vilariño de Conso otra persona de una perrera ha perdido siete; en Cualedro, hay cinco casos; y en A Caridad (Monterrei), otros seis. Ha sido un desastre". Sin excepción por edades o razas, los animales fallecieron. Comparten una causa común, según la veterinaria de Vilardevós: "
La plaga también ha llegado a Riós. Cándido, de la peña Comanche que también se dedica al jabalí, tiene la perrera en la aldea de Castelo de Cima y sufrió tres bajas de su cuadrilla de quince animales, hace un mes. Compró diez sacos de "Good Nutrition", un pienso que según los veterinarios de la zona no se fabrica desde hace seis años, pero que el comerciante asegura haber adquirido el pasado mes de junio en un lote de 500 sacos, como se explica en el despiece de esta información.
"Era la primera vez que les daba este pienso y aparecieron muertos al día siguiente", dice Camilo, que se pregunta el porqué. "No lo entiendo, porque ya les había dado la misma marca unos tres meses antes". Este cazador pretende que el vendedor le devuelva, al menos, "el dinero de los sacos sin usar".
Algunos veterinarios consultados ayer cifran en más de 80 los posibles casos de bajas en las comarcas de Verín, Monterrei y Viana, entre animales de perreras para su empleo en la caza mayor pero también entre mascotas. Una mujer, Merce Prieto, alerta en su Facebook contra el producto tras vincularlo con la muerte del perro de su padre. En Vilardevós, según la veterinaria Inmaculada Vila, se contabilizan unos cuarenta casos. Los últimos se registraron a mediados de este mes de agosto.
Las autopsias de los animales afectados reflejan roturas y dilataciones del estómago. "Es una muerte con mucho dolor al principio y que luego se produce de forma repentina, a las pocas horas de la ingestión", explicaban ayer los expertos.
Noticia de forodevigo.es